Travesia

Una nueva experiencia aventurera en la montaña invernal. Experiencia muy dura.

Este fin de semana ha llegado a la península ibérica un frente que ha enfriado las temperaturas y dejado lluvias en media España. Las cotas de nieve han bajado en todos sitios. En la Sierra de las Nieves, la previsión era encontrar la cota de nieve entre 1100 y 1200 msnm, con abundantes precipitaciones y vientos de 50 km/h. Esto significa que encontraríamos nieve y venstica en una de nuestras montañas preferidas: el Pico Torrecilla.

3 compañeros salimos de Dos Hermanas a las 7:00 de la mañana del sábado 6 de abril en dirección a Ronda. Tras la correspondiente parada para desayunar, llegamos al punto de inicio de la ruta, el Área Recreativa de Los Quejigales. El aparcamiento está realmente lleno de vehículos. No somos los únicos a los que se les ha ocurrido esta idea. Aún así, con un tiempo inestable no es común ver a tanta gente aquí.

Podemos ver cláramente la nieve a nuestro alrededor. La temperatura al bajarnos del coche es aproximadamente 2ºC. Mientras nos preparamos para empezar a andar comienza a nevar fuertemente, así que desde el mismo punto de inicio tenemos una idea clara sobre lo que será el resto de la jornada. Son las 10:30 de la mañana y hemos empezado a andar con 30 minutos de retraso con respecto a nuestra planificación, que incluye hacer cima a las 14:00 y estar de vuelta en el coche a las 18:00.

Selfie

Hoy estamos muy motivados, y subimos por la Cañada del Cuerno a muy buen ritmo, disfrutando de los paisajes espectaculares que nos ofrece el monte. La nevada nos da un respiro mientras ascendemos este primer tramo de la ruta clásica al Torrecilla. No tenemos ni idea cómo se presentará la meteo en el resto de la jornada, pero por ahora la cosa pinta bien: nieve, viento y temperatura soportables, traemos el material técnico adecuado.

Cuando alcanzamos el Puerto de los Pilones, a unos 1700 msnm, vemos cláramente cómo la cantidad de nieve es mucho mayor que abajo. La temperatura también es más baja, por supuesto. Teníamos dudas sobre cómo nos trataría el viento aquí arriba, pero la verdad es que a nuestra llegada no era muy extremo. En este punto nos encontramos a una pareja, Chus y Rafa, de Huelva, que vienen con el mismo objetivo que nosotros. La montañera Chus encabeza su equipo, y nos comenta sus dudas acerca de la meteorología y la ruta. No han podido encontrar una huella clara en el camino, y están dispuestos a darse la vuelta en ese mismo momento. Les invitamos a que se unan a nuestro equipo, y que entre todos vayamos abriendo la huella en la nieve. Nos proponemos continuar hasta el pozo de las nieves de Puerto Oso y allí evaluar de nuevo la situación.

Continuamos marchando. Según el tramo, encontramos unos pocos centímetros de nieve o bien nieve hasta cubrir por completo el tobillo, a la altura de los gemelos. Alcanzamos el pozo de las nieves sin mayor novedad. Comprobamos horarios y planificación, y todo parece estar en su sitio. La meteorología se está mostrando suave, a pesar de la escasa visibilidad. Tenemos los ánimos muy altos, las energías muy altas y lo estamos pasando fráncamente bien. Tenemos exáctamente lo que veníamos a buscar. Por otro lado, somos plenamente conscientes de lo rápido que pueden torcerse las cosas, y entre los 5 hablamos de la posibilidad de volver atrás en este punto. Pero no encontramos ningún motivo de peso que nos haga acortar tánto la ruta. A pesar de que sentimos que ya hemos cumplido los objetivos del día, decidimos que nuestro objetivo superior es la cima del pico Torrecilla.

Grupo

Iniciamos de nuevo la marcha, y nos cruzamos con un nutrido grupo de montañeros que también se dirigen al pico. A los pocos minutos, parece mentira, empieza a arreciar la ventisca. Ahora es de verdad. Nos vemos obligados a cerrarnos toda la ropa, a cubrirnos y a ponernos las gafas de ventisca. Gafas que sirven de poco, porque se empañan debido al esfuerzo de la marcha sobre la nieve, y que se congelan en el lado donde sopla la ventisca. La visibilidad con las gafas puestas es muy limitada, pero quitarte las gafas significa recibir la nieve diréctamente en los ojos. Está nevando de lado.

Las condiciones de dureza de la meteo van en aumento, y de esta manera iniciamos el ataque final a la cima. En estos últimos repechos, la ventisca se hace realmente extrema, en el límite de lo soportable. Si hubiera sido algo más fuerte, tendríamos que haber desistido. La nieve a alta velocidad nos quema el lado de la cara por donde nos impacta. Las gafas no sirven de nada. A las 14:00 llegamos a la cumbre, justo a la hora prevista. Creo que no llegamos a estar ni 5 minutos en la cima, pues el frio, el viento y la nieve eran insoportables. Unas fotos rápidas y para abajo. La bajada también muy rápida hasta la cueva del Pilar de Tolox, donde nos refugiamos unos momentos para descansar y comer algo rápido.

Cima del Pico Torrecilla

Un compañero del equipo se dá un fuerte cabezazo por accidente contra el techo de la semi cueva, lo que nos pone en alerta sobre lo delicado de nuestra situación en caso de una emergencia. Además, este ataque tan rápido a la cima en unas condiciones tan duras me pasa factura en lo físico, y personalmente me encuentro extenuado, con las piernas muy cargadas. Como suele ocurrirme, siento cómo mi estado mental y anímico pierden fuelle rápidamente, así que mientras iniciamos de nuevo la marcha pongo en práctica una de mis técnicas favoritas: distraerme charlando. Tengo muy presentes los hechos que ocurrieron aquí mismo en 2017, cuando un miembro del equipo estuvo a punto de quedar inmovilizado a merced de la hipotermia. Me pongo a charlar con mis compañeros de equipo, pero la realidad es que tengo que entrar en modo ahorro de energía física y avanzar léntamente durante un buen rato porque realmente estaba escaso de energías. Además tampoco podemos charlar mucho, porque a los demás también les falta el resuello. Y porque con la ventisca teníamos que hablar a gritos para escucharnos, estando al lado.

En este tramo de la vuelta el avance se hace penoso, muy lento a causa de las energías y empeorado por la nieve del camino. Por suerte la nieve era polvo, pero ocurría otra cosa curiosa: nuestra huella del camino de ida se ha borrado a causa de la continua nevada. Tenemos que volver a abrir la huella en el camino de vuelta. Los caminos están totalmente desdibujados, pero gracias a nuestros conocimientos previos de la zona, no tendremos demasiados problemas para alcanzar de vuelta el pozo de nieves.

Bajando por la Cañada de las Animas

Decidimos bajar por la Cañada de las Ánimas, para salir antes de la alta montaña y quitarnos ántes de la ventisca. Los ánimos mejoran al entrar en el bosque. Nos sentimos más protegidos de los elementos aquí, pero aún así bajamos a toda velocidad por este tramo boscoso. Se nota además que la temperatura está subiendo, porque la nieve acumulada en las copas de los árboles empieza a caernos en forma de agua. A medida que bajamos, más nos mojamos. De hecho, cuando salimos del bosque empieza a llover. Estamos oficialmente por debajo de la cota de nieve. Esta última media hora es la despedida de la montaña, de la naturaleza, y llegaremos empapados al coche a las 16:50.

Hemos ganado más de 1h de ventaja a nuestra planificación original. Sumando al retraso inicial de por la mañana, nuestros tiempos de hoy no han estado nada mal. Subida y bajada del Torrecilla en menos de 7 horas, en condiciones de ventisca extrema. Hemos acabado la ruta con 4 horas de margen de luz, ya que el anochecer estaba previsto para las 20:45 aproximadamente. Nos despedimos de nuestros compañeros de Huelva, y mientras nos cambiamos de ropa, reflexionamos sobre la jornada. Ha sido un día muy bueno, en el sentido de que hemos vivido una gran aventura, una gran experiencia en la montaña, la naturaleza nos ha retado y hemos venido preparados y motivados para afrontar el reto. Las situaciones así son imponentes, y nunca puedo evitar pensar en el gran marrón que supone lesionarse, tener cualquier inmovilización o incluso perderse en el monte mientras reina semejante meteorología. Calculo que en la cima habria unos -10ºC de sensación térmica.

Un video resumen de la experiencia:

Hemos formado un equipazo hoy. La última ventisca de la temporada ha sido espectacular.